El que una novia vaya a su boda embarazada no tiene por qué ser un obstáculo para lucir un vestido espectacular y que la haga estar radiante el día de su boda.

Lo primero que hay que tener en cuenta a la hora de elegir el modelo es en que momento del embarazo se va a encontrar la novia en el momento del enlace, ya que no es lo mismo elegir un vestido para una mujer embarazada de 3 meses que para una de 7 meses.

Otra cuestión importante a tener en cuenta es si la novia quiere mostrar abiertamente el embarazo, o al revés, quiere tratar de disimularlo lo máximo posible, en función de esto también tendrán más relevancia un estilo de vestido u otro.

Sea lo que sea lo que decida, actualmente hay modelos para todos los gustos y de todos los tipos, ya que la mayoría de las firmas incluyen en sus colecciones vestidos de novia para mujeres embarazadas.

En general los más aconsejables son vestidos que no se ajusten o aprieten al cuerpo, más que nada por la comodidad de la novia, vestidos sueltos, con caida y vaporosos, y uno de los estilos que más suele favorecer a las mujeres embarazadas es el corte imperio.

También es muy importante elegir bien el tipo de escote, ya que el cuerpo en estos meses sufre muchos cambios y hay que buscar siempre lo que quede más favorecedor.

De todas formas hoy en dia todos los vestidos son hechos a medida, de forma que se amoldan perfectamente al cuerpo de la mujer sea cual sea su estado de avance del embarazo.

Como consejo adicional, el vestido se debería comprar por supuesto con suficiente tiempo de antelación, pero lo más tarde posible, ya que cada mujer es un mundo y cada cuerpo experimenta los cambios del embarazo de una forma distinta, aunque como la ultima prueba suele ser prácticamente la semana de antes de la boda, no suele haber ningún problema a la hora de realizar los últimos retoques.

De lo que se trata en definitiva es de que la novia encuentre su vestido ideal, uno con el que se sienta guapa, atractiva, sexy y cómoda.